La nueva cronología
Autor: Daniel Evangelista
Anatolij Timofeevič Fomenko nació en 1945, es miembro de la Academia de Ciencias de Rusia, la Academia de Ciencias Naturales de Rusia y la Academia Internacional de Educación Superior, es profesor con un doctorado en física y matemáticas y director del Departamento de Matemáticas y Mecánica de la Sección de Matemáticas de la Universidad Estatal de Moscú. Resolvió el problema de la meseta a partir de la teoría de superficies espectrales mínimas. Autor de 200 publicaciones científicas, 28 monografías y libros de texto sobre matemáticas, con especialización en geometría y topología, cálculo y variaciones, topología simpléctica y más. El profesor Dr. Fomenko tiene como objetivo reescribir gran parte de la cronología de la historia. Originado de un trabajo del astrofísico estadounidense Rober Newton que se basa en pruebas matemáticas del preceso lunar y sus eclipses, solo encuentra coincidencias precisas en un arco específico de la historia. Al principio asumió algún tipo de interferencia gravitacional, pero esta opción finalmente fue descartada y las fechas de manuscritos y textos que han sobrevivido hasta el día de hoy se consideraron corruptas.
La idea de que la historia tal como la conocemos hoy en día es incorrecta no es original de Fomenko, muchos otros estudiosos antes que él la han propuesto. Solo por nombrar algunos: Sir Isaac Newton fue un matemático, mecánico, físico y astrónomo, el creador de la mecánica clásica, miembro de la Royal Society of London hasta 1672 y su presidente hasta 1703, escribió dos importantes obras sobre cronología, el primero "Una breve crónica desde el primer recuerdo de los reyes de Europa hasta la conquista de Persia por Alejandro Magno" y el segundo "La cronología de los antiguos reinos modificados". Jean Hardoin (1646-1724), historiador y arqueólogo jesuita, consideraba que la literatura clásica se había escrito en los monasterios durante el siglo XVI anterior. Robert Baldauf escribió 'La historia y sus críticos' en 1903, demostrando que no solo la historia antigua sino también el principio de la historia medieval era incorrecto. Edwin Jhonson (1842-1901) fue un científico inglés, autor de muchos estudios críticos notables de la historia antigua y medieval, que llegó a decir que "estamos mucho más cerca de la época de los griegos y romanos de lo que muestran las tablas cronológicas nos". Peter Nikiforovich Krekshin (1684-1763), secretario personal de Pedro el Grande, escribió un libro en el que criticaba la versión contemporánea de la historia romana, señalando que estaba "todavía fresca" en ese momento. Wilhelm Kammeyer, un científico y abogado alemán, desarrolló un sistema para identificar la autenticidad de un documento antiguo. Wilhelm descubrió que casi todos los documentos antiguos y medievales eran en realidad copias o artefactos creados en tiempos recientes y llegó a la conclusión de que la historia antigua y medieval temprana había sido falsificada, escribiendo muchos libros. Immanuel Velikovsky (1895-1979), estimado psicoanalista de origen ruso que vivió en Alemania, Palestina, Gran Bretaña y Estados Unidos. Escribió innumerables libros sobre historia antigua sobre sus peculiares contradicciones. Nikolaj Aleksandrovič Morozov, un enciclopedista ruso, señaló la existencia de una correlación entre las dinastías de los reyes del Antiguo Testamento y los emperadores romanos y sugirió que toda la cronología antes del primer siglo estaba equivocada. Se podrían mencionar muchos más, pero sigamos adelante.
Fomenko examina los eventos astronómicos encontrados en textos antiguos y sugiere que la cronología es medieval. Por ejemplo:
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Asocia la estrella de Belén con la supernova de 1140 d.C. (± 20) y el eclipse solar que ocurrió durante la crucifixión de Jesús con el eclipse solar total de 1170 d.C. (± 20). Ambos pares de eventos tienen la misma secuencia básica (primero la aparición de la estrella, luego el eclipse), y la distancia temporal en ambos casos es la misma (32 años, la edad aproximada de Jesús en el momento de su muerte): esto es bastante raro, y para Fomenko no es una coincidencia, sino una prueba de la veracidad de su teoría.
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Afirma que el catálogo de estrellas del Almagesto, atribuido al astrónomo Claudio Ptolomeo, fue elaborado entre el 600 y el 1300 d.C.
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Retoca y completa algunos de los análisis de Nikolaj Morozov de los horóscopos antiguos, especialmente el llamado Zodíaco de Dendera, dos horóscopos trazados en el suelo del templo de Hathor, y concluye que se refieren a los siglos XI y XIII d.C. La historia tradicional los interpreta. como referidos al siglo I a.C. o sugiere que no deben estar relacionados con ninguna fecha en particular.
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En su análisis final de una tríada de eclipses descritos por Tucídides en la Guerra del Peloponeso, Fomenko fecha los eclipses en 1039, 1046 y 1057. Debido a la estructura en capas del manuscrito, concluye que Tucídides vivió en el período medieval.
Uno de los métodos más simples utilizados por Fomenko es la correlación estadística de textos. Su punto de partida es que un texto que describe una secuencia de eventos dedicará más espacio a eventos importantes (por ejemplo, un período de guerra o revuelta más espacio que un período de paz, o años sin eventos particulares), y que esta irregularidad seguirá siendo visible. en otras descripciones del evento. Para cada texto analizado se realiza una función matemática que mapea cada año mencionado en el texto con el número de páginas (o líneas, o letras) dedicadas en el texto a su descripción, que también podría ser cero, si por ejemplo en la comparación entre dos textos, el evento se describe en un texto y no en el otro. Luego, las funciones de dos textos se comparan entre sí.
Por ejemplo, Fomenko compara la historia contemporánea de Roma escrita por Titus Livius con la Historia moderna de Roma escrita por el historiador ruso Vladimir Sergeyevič Sergeyev, calculando que ambas tienen una alta correlación, ya que describen el mismo período de la historia, sin generar disputas. También compara textos modernos que describen diferentes períodos y calcula una correlación baja como se esperaba. Sin embargo, cuando compara, por ejemplo, la historia antigua de Roma y la historia medieval de Roma, calcula una alta correlación y concluye que la historia antigua de Roma es sólo una copia de la historia medieval de Roma, que choca con la historia común. concepción histórica.
Fomenko también menciona una serie de casos de datación por carbono 14 (ahora obsoleto) que llevaron a una datación falsa de objetos de períodos que se habían establecido antes de la calibración con la escala cronológica. También menciona la extraña cooperación entre físicos y arqueólogos en la obtención de fechas, ya que la mayoría de los laboratorios de datos solo aceptan muestras con una fecha ya estimada por historiadores o arqueólogos. Fomenko también afirma que la fecha del carbono 14 en un rango del año 0 al 2000 d.C. carece de precisión porque tiene demasiados errores posibles y que la calibración se realiza con un número estadísticamente insignificante de muestras. En consecuencia, Fomenko concluye que la datación por carbono 14 no es lo suficientemente precisa como para usarse con un alto margen de precisión.
Está de acuerdo con los métodos de datación absoluta para tabletas o monedas de arcilla, como la termoluminiscencia, la luminiscencia óptica y los métodos arqueomagnéticos o metalográficos, pero subraya que su precisión es insuficiente para trazar puntos fijos en el tiempo.
Fomenko generalmente condena la práctica arqueológica común de fechar especímenes acompañados de estimaciones de edad, argumentando que la concordancia entre métodos de datación que son inherentemente inciertos no prueba nada, pero de hecho es una profecía autocumplida: incluso si la suma de la probabilidad de veracidad de un evento producido por N métodos de datación es mayor que 1, esto no significa que el evento ocurrió con 100% de probabilidad.
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